16 Jul Beneficios de seguir una dieta vegetariana
Cada vez más gente, especialmente jóvenes, se unen a la dieta vegetariana. Y es que son muchos los motivos por los que rechazar alimentos de origen animal. Además, en primavera y verano resulta altamente recomendable por su riqueza en frutas, cuyo alto contenido en agua nos ayuda a combatir el calor y el bajo aporte calórico a controlar nuestro peso. Sin embargo, no todos los vegetarianos comen lo mismo.
Tipos de dietas vegetarianas
No todos los que rechazan la carne animal se alimentan de la misma forma. Dependiendo de los valores éticos y las preferencias de cada persona existen distintos tipos de dietas:
– Veganos: no ingieren ningún tipo de producto de origen animal. Esto se aplica también fuera de la dieta y evitan productos textiles como la lana o el cuero, bajo la idea de que obtener estos bienes supone mantener la explotación animal.
– Lacteovegetarianos: son vegetarianos que no consumen carne animal ni huevos pero sí leche y los productos derivados de ella.
– Ovolacteovegetarianos: incluye a personas que no consumen carne animal pero sí huevos, leche y derivados de estos.
Además, existen otras dietas menos conocidas como los semivegetarianos. Estos comen carne pero en una considerable menor cantidad o como los pescetarianos que solo se permiten consumir animales marinos.
¿En qué consiste la dieta?
Existen varios tipos de dietas, pero todas son saludables si se realizan correctamente y se suplen todas nuestras necesidades nutricionales. En invierno las sopas de verdura son una buena opción contra el frío y en verano y primavera podemos recurrir a smoothies y fruta fresca para combatir el calor. Para el aporte de calcio encontramos la leche de almendra y para las proteínas nos sirven las legumbres. En la farmacia también se pueden adquirir complementos alimenticios especialmente indicados para complementar este tipo de dieta de forma más fácil.
Beneficios de las dietas vegetarianas para la salud
Contrariamente a lo que se suele pensar, las dietas vegetarianas no solo no son perjudiciales para la salud, sino que además aportan numerosos beneficios. Entre los más significativos podemos encontrar los siguientes:
– El alto aporte de fibra que poseen frutas y verduras reduce el riesgo de padecer diabetes y aumenta nuestras defensas mejorando nuestra flora intestinal. Constituyen también un desintoxicante natural.
– El riesgo de padecer distintas cardiopatías es menor. La tensión arterial y el colesterol malo o LDL se mantienen en niveles saludables debido a la reducción de grasas saturadas y al aumento de antioxidantes.
– El consumo de alimentosde bajo aporte calórico aumenta la esperanza de vida.
– El bajo aporte calórico nos ayuda también a mantener un peso saludable.
En definitiva, la dieta vegetariana es una opción saludable y altamente recomendable especialmente en primavera y verano. Existen motivos animalistas y ecologistas por los que adoptar estos hábitos alimenticios, pero hoy queremos señalar el impacto positivo que puede suponer en nuestra salud.